sábado, 25 de junio de 2016

Apium graveolens, apio pascal

El apio pascal es un vegetal perteneciente a la família de las apiáceas (como la zanahoria, el perejil o el anís), tradicionalmente llamadas umbelíferas.  Procede del área mediterranea, donde lleva muchos siglos cultivándose como planta comestible.
Presentan un tallo fino y largo, con estrias longitudinales y de médula muy blanda. Tiene unas pequeñas hojas alternas, también comestibles. Las flores, que suelen aparecer al segundo año, son blancas y se presentan en forma de umbelas.
El apio pascal, que se puede consumir tanto cocinado como crudo, tiene grandes propiedades tanto nutricionales como medicinales. Gracias a su alto contenido en agua, aporta sólo 16 calorias por cada 100 gramos, lo que convierte al apio en un ingrediente muy recomendable en las dietas de adelgazamiento. Además contiene una gran cantidad de vitaminas (A, B1, B2, C y E) y minerales como el potasio, sodio, magnesio o hierro. Sin embargo, el consumo de apio podría estar contraindicado en mujeres embarazadas.

Así son las pequeñas semillas del apium graveolens.

Con una buena tierra bien drenada y un riego constante en un plazo corto de tiempo tendremos las primeras plántulas de apio.

Una vez transplantadas, en una pequeña maceta podremos tener una planta de unos 30 centímetros o más.

Estas son las hojas con su tamaño final.

Aquí podemos apreciar el tallo estriado del apio pascal.

Las flores empiezan a abrirse.

Como vemos las flores son muy pequeñas y de color amarillo.